La estatua de la Libertad "La Libertad iluminando el mundo" ("Liberty Enlightening the World"), fue un regalo de Francia a los Estados Unidos como símbolo de la amistad entre ambos países en el centenario de la Declaración de Independencia estadounidense. Está situada en la desembocadura del río Hudson en el puerto de la ciudad de Nueva York, en una pequeña isla, dando la bienvenida a todos los que llegan al país, visitantes e inmigrantes. El escultor de la obra fue Frédéric Bartholdi y el ingeniero Gustave Eiffel (autor de la torre Eiffel de París) creó la armadura que la sostiene, mientras que el pedestal fue construido en los Estados Unidos. La estatua lleva una antorcha en su mano derecha y una tabla en la izquierda con el texto "JULY IV MDCCLXXVI", la fecha de la Declaración de Independencia. Uno de sus pies pisa unas cadenas, y las siete puntas de su corona representan los siete mares o los siete continentes. La altura del conjunto, incluyendo la base y el pedestal, es de 93 metros, mientras que la estatua mide 46 metros y está construída con delgadas láminas de cobre montadas posteriormente sobre el esqueleto de acero. Se puede acceder en un ferry a la isla donde está la estatua, y se puede subir hasta la corona para asomarse al puerto de Nueva York. En el pedestal hay un museo en el que se muestra la historia de la estatua.
2ºF:
El Toro de Wall Street (en inglés: Wall Street Bull o Charging Bull, toro de carga) es una escultura de bronce que pesa 3.200 kg creada por Arturo Di Modica situada en el parque Bowling Green cerca de Wall Street en la ciudad de Nueva York. La escultura representa a un toro, el símbolo del optimismo, agresividad y prosperidad financiera. El toro tiene las patas delanteras flexionadas y la cabeza ligeramente agachada como si estuviese a punto de embestir.
Di Modica gastó 360.000 dólares en crearla y situarla, después de la crisis bursátil de 1987, como un símbolo de la fuerza y el poder de los estadounidenses. En un acto de "arte de guerrilla", llevó la estatua el 15 de diciembre de 1989 frente a la bolsa de Nueva York como regalo de Navidad para los ciudadanos de la gran manzana.
El clamor del público cada vez fue mayor para que el Departamento de Parques y Zonas de Recreo de la ciudad de Nueva York colocase esta escultura en la plaza Bowling Green, al final de Broadway.
Esta escultura, una de las obras más fotografiadas, se ha convertido en un destino turístico en el Distrito Financiero en el que se sitúa. Además, ha pasado a ser de forma no oficial el símbolo del Distrito Financiero, y muchas veces se habla de él en los medios otorgándole siempre aires de optimismo y de prosperidad económica.
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